Hace ya, veinticinco años, por estas fechas, se instala en la calle Arlet de Barcelona, en su camino espiritual hacia la Meca.
Jalal Mansur Nuriddin (New York, 1944 – Atlanta, 2018) poeta, activista ameriKKKano y de confesión: Musulmán.
“El Abuelo del Rap”
Como miembro de los icónicos The Last Poets, Jalal ayudó a definir en la década de los sesenta una nueva era de expresión cultural negra, sentando las bases del rap, el hip hop y, de paso, la conciencia afroamericana, hoy una cultura global.
Como solista, bajo el seudónimo de “Lightnin’ Rod”, la Band of Gypsys:
Jimi Hendrix y Buddy Miles y la colaboración de Larry Young, al órgano, graba el tema “Doriella du Fontaine”, un épico relato de los afanes de una prostituta y su macarra para retirarse, tras dar un golpe definitivo. Se comenta que el sonido más negro que grabó Jimi Hendrix fueron las bases del hip-hop en este tema, que le sirvió de ayuda para aplacar la presión de las Panteras Negras, por no defender la causa afro.
Jalal dio un giro a su carrera en 1973 para convertirse en un narrador de realidades políticamente incorrectas con el disco “Hustlers convention”, con el acompañamiento de Tina Turner, Billy Preston y Kool & the Gang, contaba las aventuras de Sport y Spoon, dos buscavidas que no dudaban en tirar de gatillo. Es uno de los discos más sampleados de la historia: desde Melle Mel con Grandmaster Flash a Red Hot Chili Peppers, todos han querido un pedazo de él.
“Con catorce años estaba intentando conocer la calle, se convirtió en mi Biblia Verbal”; Chuck D, Public Enemy.
Un héroe para artistas como Miles Davis, Kendrick Lamar, Quincy Jones o Tupac, por su música hablada y su forma de afrontar la vida.
Jalal visitó varias veces la Barcelona post olímpica, cuando estaban extirpándole varias arterias vitales del corazón del barrio xino para construir una nueva rambla.
Teníamos en común, entre otros placeres: la afición a la música negra, la hierba buena y el flamenco.
Conocí bien su dominio del Kung Fu, la acupuntura y su forma tan flamenca de vivir la vida. Venía buscando una Barcelona que poco a poco iba desapareciendo, así con eso, le encantaba perderse por los callejones de la ciudad antigua y descubrir esos personajes que aún pululaban entre los portales y las esquinas.
Participe en sus rimas sobre su NYC, su aportación a los movimientos sociales de empoderamiento del pueblo negro, su anticristianismo que lo convirtió al Islam y su descubrimiento a través de los músicos latinos llegados a Harlem, como Mario Bauza, Chano Pozo o Machito, de un doble mensaje: llevaban África en el corazón y el flamenco en la mente.
Jalal actuó en varias ocasiones en el Jamboree, de la plaza real, aunque su programación favorita estaba en Los Tarantos, “el flamenco era un navajazo y el hip hop eran disparos”. Maestro de la vida, me hizo ver que no conocemos la realidad de la música negra americana y que el flamenco era nuestra conexión más fuerte con la cultura africana.
Siempre activo en el tema de que una Revolución era posible, "When the Revolution comes" fue uno de sus gritos de guerra con TheLast Poets. Me permito que el que no sea Negro, pero sea Persona, cambie en la letra Negro por persona y Afro por Dignidad, así me lo transmitió un amigo Jalal, compositor y activista del tema. No es cuestión de naciones, razas o credos. Letra en castellano, les aconsejo la miren en ingles, si lo entienden:
"Cuando llegue la revolución
(Cuando llegue la revolución)
Algunos de nosotros probablemente lo veremos en la televisión, con pollo colgando de la boca.
Sabrás que es una revolución porque no habrá comerciales
Cuando llegue la revolución
Cuando llegue la revolución
(Cuando llegue la revolución)
Los proxenetas predicadores dividirán la escena con el vino de comunión metido en sus bolsillos traseros
Los maricones no serán tan graciosos entonces, y todos los adictos dejarán de asentir y se despertarán
Cuando llegue la revolución
Cuando llegue la revolución
Los policías de tránsito serán aplastados por los trenes después de perder sus armas y la sangre correrá por las calles de Harlem ahogando cualquier cosa sin sustancia.
Cuando llegue la revolución
Cuando llegue la revolución
(Cuando llegue la revolución)
Ojalá caigan dientes blancos nacarados de las bocas que hablan de revolución sin reverencia
El costo de la revolución es de 360 grados.
Entiende el ciclo que nunca termina
Entiende que el principio es el final y que no hay nada en el medio excepto el espacio y el tiempo que yo hago, o tú haces, para relacionar, o no relacionar, con el mundo fuera de mi mente, tu mente. No hables de revolución hasta que estés dispuesto a comer ratas para sobrevivir.
Cuando llegue la revolución
(Cuando llegue la revolución)
Cuando llegue la revolución
Cuando llegue la revolución
Pistolas y rifles tomarán el lugar de poemas y ensayos
Los centros culturales negros serán fortalezas que abastecerán de alimentos y armas a los revolucionarios
Cuando llegue la revolución
Cuando llegue la revolución
La muerte blanca espumará las paredes de museos e iglesias rompiendo la mentira que esclavizó a nuestras madres
Cuando llegue la revolución
Jesucristo estará parado en la esquina de Lennox Ave y 125th St tratando de tomar el primer taxi gitano que sale de Harlem.
Cuando llegue la revolución
Cuando llegue la revolución
Los comerciantes judíos regalarán bolas de matzá y regalarán pescado a cualquiera que vean con un afro.
Frank Schiffman regalará el Apollo a la primera persona que vea con un dashiki azul
Cuando llegue la revolución
(Cuando llegue la revolución)
Afros va a estar tratando de enderezar sus cabezas y las cabezas enderezadas van a estar tratando de usar afros
Cuando llegue la revolución
Cuando llegue la revolución
(Cuando llegue la revolución)
Pero hasta entonces sabes y yo sé que los negros festejarán y mentirán
Y fiesta y estupideces
Y fiesta y estupideces
Y fiesta y estupideces
Y fiesta...
Algunos incluso podrían morir antes de que llegue la revolución".
Al hilo de la cuestión,
Manuel Soto Loreto (Jerez de la Frontera, 1878- Sevilla, 1933), conocido como “Manuel Torre”, cantaor gitano, padre de los “sonidos negros”. Sus aficiones eran los perros galgos, los pollos ingleses y los relojes de bolsillo.
"Todo lo que tiene sonidos negros tiene duende" .
“En el cante jondo lo que hay que buscar siempre, hasta encontrarlo, es el tronco negro del Faraón”
“Manuel, el hombre con mayor cultura en la sangre", Lorca en su conferencia "Teoría y juego del duende":
“Cuando por fin ya despuntaba la mañana y queríamos irnos a casa, oíamos los golpes rítmicos de su bastón, observábamos gotas de sudor en la frente de Manuel y veíamos cómo el color de bronce de su rostro se acentuaba, como si el demonio ardiera debajo de su piel. Entonces le salía el cante grande como los entendidos llaman al cante maestro. Maravillados escuchábamos esta siguiriya, ya que expresaba algo más que mera melancolía popular. Un pesimismo infinito, un sentimiento oscuro que encierra la vida humana, llenaba su cante”.
¿Fue Manuel Torre uno de los precursores del Black Power?
Grabado en Barcelona durante las muchas estancias de Manuel por estos lares, le acompaña el propietario del Villa Rosa, del Arc del Teatre, Miguel Borrull y los jaleos son de Pastora Pavón, “La Niña de los Peines”. La grabación no recoge seguro ni el 30% de poderío que tenía Manuel, cantaba bien cuando le pillaba a gusto y despuntaba el alba.
La guitarra de Jimi Hendrix, me recuerda a la de Borrull y el cante de Manuel, como diría Jalal, admirador de su cante, para romperse el traje entero, un verdadero Blues:
“Qué desgracia yo tengo
madre en el andar
qué desgracia yo terelo
madre en el andar
como los pasos que para a(de)lante yo echo
se me vuelven atrás
qué desgracia yo terelo
madre en el andar”