"Empezó a cantar Camarón en el patio y yo no me lo podía creer, el impacto fue tan fuerte... sentí como que había llegado El Mesías. No me podía imaginar que se podía cantar así. Me impactó de una manera brutal. Imposible de definir. Ahí le dije: Camarón vente a Madrid a grabar. Fue lo más importante musicalmente que me ha pasado en la vida, conocer a Camarón".
“Creo que conozco todo tipo de músicos y músicas de todo el mundo, pero nadie me ha sorprendido e impresionado como Camarón aquel día. Juntos empezamos a componer música nueva”, Paco de Lucia, con quien paso la primera etapa de su carrera discográfica como, Camarón de la Isla.
Tomatito, siendo un niño y como un campeón asume el reto de sentarse a acompañar a uno de los cantaores que más le gusto una guitarra.
¿Camarón te enseñó a tocar la guitarra?
“He estado toda la vida con él, que me enseñó a tocar para el cante, por supuesto; para mí, el mejor de todos los tiempos. El guitarrista, para acompañar bien, tiene que aprender del cantaor todas sus formas. Con Camarón imagínate. Empecé muy niño junto a José Monje, si decía aquí suave, pues suave, aquí para… Si cantaba como cantaba, es porque toda la documentación del flamenco, la sabía. Era un purista en todas sus formas. Tienes que conocer muy bien todos los cantes y a partir de ahí puedes crear, evolucionar, pero siempre desde el conocimiento. Pero aprender a tocar… Yo vengo de una familia de grandes guitarristas y ya tocaba antes de que me reclamara; pero lo que me aportó a lo largo de tanto tiempo, ha influido mucho en lo que vino después".
¿Sin Camarón, no existiría Tomatito?
“Si lo creo. Pero hasta cierto punto. Fueron muchos años juntos. Cuando anunciaban “la guitarra de “Tomatito” salía Camarón. Cierto que hice cosas sin él. Un artista, si tiene inquietudes, siempre tiene cosas propias que expresar. Pero lo que quiero decir con esa frase, no es un homenaje al maestro. Si Camarón estuviera vivo, lo primero sería acompañarle a él. El resto estaría en segundo lugar y hubiera tenido menos tiempo para hacer lo mío. Desgraciadamente, murió. No afortunadamente. Es posible que hubiera hecho lo mismo que he hecho, pero con menos intensidad y mucho menos tiempo. Creo que nací para tocarle a él. Si me llamaba para un bolo, una gira, lo dejaba todo y allá estaba yo”.
Otro que estaba cuando lo llamaba era Don Ricardo Pachón.
"El primer guitarrista de Camarón fue Camarón. Tocaba muy bien y no llegó a ser un virtuoso porque no estudiaba lo que este instrumento tan exigente requiere"
Pachón que conoció al de la Isla por una guitarra en la Venta de Vargas.
"Ese niño rubito, que ya tenía un halo mágico, como dicen que tenía también desde niño García Lorca, no dejaba de llorar por la guitarra”
Se le había roto su guitarra y emocionado Pachón le compró las astillas por 2.000 pesetas. Años después, la restauraría y la perdería con otro grande del cante, Antonio Mairena.
Desde niño siente pasión por la guitarra y se preocupa en aprender de todos y todo. Aunque con la guasa cañailla solía decir:
"Por bulerías, no me toques los cajones”
Camarón en sus escapas barcelonesas, las anécdotas son muchas, pero esta tiene que ver con el instrumento en cuestión. Visita una tienda de instrumentos de la ciudad y así lo recuerdan los propietarios del negocio que le compraron una guitarra.
“Camarón de la Isla. Con admiración y mucho cariño recordamos su vida y su arte, pero sobre todo la amistad que compartió con el fundador de nuestra Casa Sors: Fernando Alonso”.
“Camarón tenía gran interés por las guitarras antiguas y eso lo llevó a visitarnos en diversas ocasiones a finales de los años 80. Desde entonces surgió una linda amistad entre Fernando Alonso y el inolvidable cantaor. El maestro Alonso nos cuenta con emoción el día que Camarón lo invitó a su concierto en la Plaza de Toros de Barcelona en el año 88, y el efecto sobrecogedor que le causaba escuchar a un artista tan sensible, tan completo y sobre todo tan buena persona”.
“Tuvimos la dicha de comprarle una guitarra Josef Pagés de 1809, que posteriormente se la vendimos al gran guitarrista y concertista, el eminente, Carles Trepat”.
Dedicatoria:
“Con admiración a esta casa de guitarra Casa Sors”
DE CAMARÓN
Fecha: 5-5-88
“Esta foto que compartimos es un tesoro más dentro de nuestra colección, que nos llena de orgullo y emociona a todos los buenos amigos y clientes que nos visitan en Casa Sors. La música y legado de Camarón quedarán siempre grabados en nuestra memoria”.
Casa Sors esta en la calle Madrazo, 52 de Barcelona.
La guitarra que Camarón vendió en Barcelona, que es la que toca en la foto dedicada a Casa Sors, tiene hoy un valor aproximado de 10.000 euros. El constructor Josef Pagés, nacido en Écija e instalado en Cádiz, fue miembro destacado de la escuela gaditana incorporó nuevos avances en la construcción de guitarras.